Cerca de 2,5 billones de pesos ha invertido EPM en la gestión social y ambiental. Durante la construcción del Proyecto Hidroeléctrico Ituango -Hidroituango-, ha realizado programas para el desarrollo de las comunidades del área de influencia del Proyecto, relacionados con conectividad, salud, educación, vivienda, servicios públicos, biodiversidad, infraestructura comunitaria, proyectos productivos, empleo, fortalecimiento de la institucionalidad y restitución de condiciones de vida.
En materia de conectividad, EPM llevó a cabo la construcción de 1.500 kilómetros de vías nuevas y mejoradas, entre las que se destaca la construcción de la carretera entre el corregimiento de Puerto Valdivia, en el municipio de Valdivia, y las obras principales de la futura central, con una extensión de 38 kilómetros, la cual atraviesa una zona históricamente olvidada y que careció de este tipo de accesos. Hoy esta obra se constituye en una excelente oportunidad para sus habitantes y en una alternativa de integración de los municipios de Ituango, Briceño y Valdivia con las rutas hacia la región Caribe colombiana.
En servicios públicos, se han electrificado 9.937 viviendas rurales de las veredas de los territorios aledaños a las obras y se han beneficiado con gas domiciliario cerca de 6.000 familias. Así mismo, se han optimizado los sistemas de acueducto y alcantarillado de los 12 municipios del área de influencia.
739 familias disfrutan de vivienda nueva o mejorada y 800 hogares más habitan viviendas de madera, gracias al programa “Aldeas” de EPM, iniciativa innovadora mediante la cual se aprovecha la madera que cumple su período de maduración en las más de 4.000 hectáreas de plantaciones forestales alrededor de los embalses de generación de energía.
Durante el pico más alto de trabajo en las obras de Hidroituango se generaron más 12 mil empleos, un 25% de estos para habitantes de los municipios del área de influencia. Además, la adquisición de bienes y servicios por parte de EPM, contratistas y subcontratistas en las diferentes localidades, alcanza hoy una cifra cercana a los 85 mil millones de pesos, un valioso aporte a la dinamización de las economías locales.
Por impactos de las obras de Hidroituango, 1.299 familias han sido compensadas e indemnizadas y 259 familias fueron beneficiadas con el proceso de restitución integral de condiciones de vida, mejorando ostensiblemente su vivienda e impulsando el desarrollo de nuevos proyectos productivos para su sustento.
Otras cifras destacadas son las 101 instituciones educativas, entre nuevas y mejoradas, para el beneficio de la formación académica de niños y jóvenes del territorio, así como la construcción de 12 canchas sintéticas de fútbol con las medidas reglamentarias en cada uno de los municipios del área de influencia, aportando al desarrollo regional a través de espacios de libre esparcimiento.
Con el Plan de Acción Específico (PAE), que se implementó en el Bajo Cauca antioqueño para la atención de la contingencia de Hidroituango, se han invertido a la fecha 260 mil millones de pesos en nueve líneas de intervención, entre las que se destacan: gestión del riesgo, accesibilidad y transporte, medios de vida e investigaciones y estudios para el mejoramiento de la cuenca del río Cauca y, por ende, de los habitantes ribereños que derivan su sustento del río.
En materia ambiental, Hidroituango avanza en el área de influencia con la compensación de 24 mil nuevas hectáreas de bosque seco y bosque húmedo tropical, como una oportunidad para la biodiversidad de la Región. Para este propósito se cuenta desde el inicio del Proyecto con un vivero con capacidad para producir un millón de plántulas al año.
Buena parte de los programas y proyectos de la gestión social y ambiental, tanto en la zona de influencia como en el Bajo Cauca, se han implementado en concertación y articulación con las comunidades y han contado con la participación de los organismos de control y protección de los derechos de los ciudadanos como la Procuraduría General de la Nación, con su delegada para la Gestión y la Gobernanza Territorial.
En esta articulación, por ejemplo, con la comunidad de Valdivia se instalaron seis mesas de trabajo relacionadas con asuntos de infraestructura, minería y educación, entre otras. Y con las administraciones municipales de Ituango, Briceño, Valdivia, Tarazá, Cáceres, Caucasia y Nechí, se conformaron mesas de trabajo para el fortalecimiento de la gestión del riesgo de desastres y el ordenamiento territorial en los municipios. En estos espacios se compartió información acerca del estado actual de las obras de Hidroituango, como parte también de la preparación del simulacro de evacuación de las comunidades para la entrada en operación segura de la nueva central de generación.
EPM asegura que Hidroituango es más que una obra de infraestructura: se ha convertido en un motor de desarrollo y bienestar para las comunidades a través de estas cuantiosas inversiones en programas y proyectos en los 12 municipios del área de influencia (Ituango, Briceño, Santa Fe de Antioquia, Buriticá, Peque, Liborina, Sabanalarga, Toledo, Olaya, San Andrés de Cuerquia, Valdivia y Yarumal) y las localidades del Bajo Cauca antioqueño.