Wilmar Campo, contador Público y magíster en Tributación, asegura que lo aprobado en 2016 en la Reforma Tributaria Estructural del expresidente Juan Manuel Santos se empezó a sentir en la Declaración del Impuesto de Renta y Complementario de este año, que es una obligación para quien haya obtenido o hecho en el año inmediatamente anterior (2017) ingresos o compras superiores a los 44.603.000 pesos o tenido un patrimonio bruto superior a los 143.366.000 pesos.
“Estamos pagando un alto precio de la Reforma Tributaria de Santos”, asegura Campo.
Pero -según Wilmar Campo- la que está en ciernes no es más halagüeña, pues el presidente Iván Duque prometió rebajar el impuesto a las personas jurídicas para crear condiciones de competitividad, al tiempo que se ha hecho el anuncio de aumentar el recaudo a las personas naturales, con el agravante para la economía de la clase social más desprotegida, de ampliar el IVA del 19 por ciento a todos los productos de la canasta familiar.
El contador y magíster Tributarista, Wilmar Campo, cree que llegó la hora de una Reforma Tributaria verdaderamente estructural, además de justa y equitativa, consistente en eliminar beneficios existentes para sectores privilegiados por décadas, en fortalecer el ejercicio fiscalizador de la autoridad tributaria y la gestión tributaria, capacitar a los funcionarios de la DIAN de las diferentes entidades territoriales del País, luchar contra la evasión y la elusión de manera frontal y adoptar medidas efectivas como la penalización tributaria…
“La propuesta de gravar más población pobre es regresiva (…) El ministro Carrasquilla debe ser muy sensato”, afirma Wilmar Campo.
