Con la realización de un foro sobre el control fiscal en Colombia, en el que intervendrán expertos de Canadá, España, México y Colombia, la Contraloría General de Antioquia celebrará sus 80 años de vida institucional.
La historia de la Contraloría General de Antioquia está ligada a los primeros intentos por establecer el control fiscal en Colombia. Su primera etapa se ubica entre los años 1821 y 1923, cuando el prócer de la independencia, Francisco de Paula Santander, se propuso organizar el control fiscal en Colombia al impulsar, el 23 de octubre de 1819, la Ley Principal contra los Empleados de Hacienda, la cual consagraba la pena de muerte para los funcionarios a quienes se les probara haber efectuado fraude o malversación de los bienes públicos.
Pero la clave en la evolución del control fiscal en Colombia debe situarse en el año 1821, cuando el Congreso de la República, a través de la Ley 8 del citado año, ordena la conformación de la Contaduría General de Hacienda con fines fiscalizadores, al considerar que era necesario organizar e introducir el orden, la economía y la uniformidad en la administración de las rentas. Dicha Ley fue abolida en agosto de 1824, para dar paso a la creación de la Dirección General de Hacienda y Rentas Nacionales. Una de sus funciones era usar la jurisdicción coactiva para el cobro de las rentas del Estado.
Al influjo de la Dirección General se estableció en cada departamento una Contaduría Departamental encargada de examinar, glosar y fenecer anualmente las cuentas de la tesorería principal y las subalternas, y de todas las administraciones de rentas que existiera en ellos.
En 1832 se revivió la Contaduría General de Hacienda, pero 15 años más tarde fue reemplazada por una corte de cuentas. En 1850 terminó parcialmente el ciclo de la corte de cuentas y surgió el de la oficina de cuentas. El código fiscal de 1873 dio nuevamente vida a la corte de cuentas.