Por: Diego Calle Pérez
La educación y la cultura son temas muy sensibles porque tocan con ideales del ser social en su naturaleza racional. Existen variados conceptos del término cultura. Todos tienen validez por simples que sean en su definición. Todos apuntan a un mismo ideal dentro de una civilización.
La educación como instrucción ha existido dentro de las grandes sociedades, formando valores, conocimientos pluralistas, gramática, geometría, lectura y caligrafía. Ejemplos son los egipcios, los griegos, los romanos, la china, la india, Mesopotamia.
Alejandro Magno fue educado por Aristóteles, Simón Bolívar por Andrés Bello en sus justas proporciones en tiempo y espacio. Sergio Fajardo, el gobernador más educado, rompió el paradigma de la política bipartidista en Medellín y Antioquia, dejando la impronta del cemento en Parques Educativos, olvidando las casas de cultura como cenicientas sin príncipe que las saque del hechizo. No planeo, no dio prioridades al campo, a la educación técnica y a las transversalidades, pareciera se encegueció por cumplir un favor y no un proyecto de gobierno serio, coherente y de contexto para todos los pueblos.
Muchos alcaldes se prestaron para congeniar con el mandatario departamental, sin proyectar la carga presupuestal que se les avecina en el futuro con los parques educativos, que se quedan como un elefante blanco, sin quien oriente y ponga a funcionar.
Un ejemplo que invito a observar son las casas de Cultura de los cientos de municipios de la llamada Antioquia, la más educada. Estanterías de libros nuevos sin descorchar, -parecen algunos para universidad-, quien dirige la biblioteca de la casa cultural no es un profesional de la Bibliotecología, ni tiene un curso en el Sena, ni sabe de documentación. Algunos de los muchos encargados de la casa cultural son el amigo, pariente o familiar del concejal o es un recomendado de la vereda que coloca muchos votos en el día electoral. Es escaso encontrar un antropólogo, un historiador, un sociólogo, o un licenciado en filosofía y letras de director cultural.
Los talleres que dictan en las casas de cultura son pobres en materiales y muchas veces ni tienen los suficientes equipos para consultar o para que los jóvenes entren a jugar al Facebook. Las casas de cultura y los parques educativos se convertirán en un problema de discusión permanente en los concejos municipales. Ni hay la visión y la educación de los alcaldes, ni concejales. No hay rubros en el plan presupuestal, desviando prioridades para el mantenimiento entre el parque educativo y la casa cultural.
Varias preguntas se hacen con bastante peso argumental. ¿Qué sentido tiene un parque educativo donde apenas se estaba teniendo conciencia de proteger el patrimonio arquitectónico de un municipio?, ¿Para que un parque educativo sin aulas suficientes en las instituciones educativas de muchos municipios? Un dilema educativo y cultual que nos deja el más educado, para solucionar. Esperemos que con los meses no se presenten los mismos problemas que surgieron con la Biblioteca España y el Parque la Ladera. Cultura y Parque Educativo van de la mano sin presupuestar su personal y su pertinencia social entre la banda musical y la tecnología.
A modo de coda: tengo varias propuestas para la transversalidad educativa de los Parques por inaugurar y la casa de cultura con las instituciones educativas del municipio por contextualizar. Candidato que la quiera conocer se la socializo sin retribución alguna, solo por la cultura.
