Por: Balmore González Mira
Hace más de tres décadas que venimos escuchando que en Urabá se requiere y se va a construir un puerto que permita la entrada y la salida de muchos productos desde Colombia hacia el mundo, en unas relaciones comerciales fluidas que permitan una dinámica económica que nos mejoren los ingresos y por ende las condiciones de vida de muchas familias.
Ahora se anuncia la construcción de tres a falta de uno y aún en la modernidad y necesidad de este tipo de infraestructura se presenta poca credibilidad entre los habitantes tradicionales y más antiguos de la región, quienes escépticos manifiestan que llevan muchos años oyendo hablar de la necesidad y de la inminente construcción de un puerto, el cual en sus largos años no han alcanzado a ver. Frente a ese panorama, jóvenes de la zona han comenzado a liderar un proyecto que comienza a impactar positivamente y que han denominado “Urabá Cultura Puerto”, con el cual pretenden mostrar las bondades y el inmenso efecto que para Colombia y América tienen lo que allí se proyecta.
El viernes 12 de mayo de 2017 quedará marcado en la historia de Urabá, como el día que se inicia la posmodernidad portuaria de la zona con la colocación, como se dice coloquialmente, de la primera piedra de Puerto Pisisí en el municipio de Turbo, el cual tiene como reto empezar a operar en menos de tres años y aportar en la conservación del medio ambiente al ser construido y operado como un ecopuerto en nuestras aguas. A este le seguirán en sana competencia comercial Puerto Antioquia también en Turbo y el que se proyecta en el Municipio de Necoclí, Puerto Darién Internacional. En esta última población se proyecta una ciudad de servicios, que entre temas de agroindustria y servicios financieros y portuarios y de variada índole, pondrán la competencia comercial al nivel de los puertos más competitivos del mundo. Una preocupación que venimos esbozando es el tema vial que lleva la conectividad a los puertos y por ello insistimos en la necesidad de que el Túnel del Toyo en el occidente antioqueño debe apurar sus obras para que sea el complemento perfecto a lo que se proyecta en Urabá.
La región de Urabá y las demás zonas que resultan impactadas por estas obras, como las comunidades del occidente antioqueño y las del Urabá chocoano y cordobés tienen que prepararse para lo que allí se avecina y que no nos coja esta gran proyección sin tener al menos la instrucción básica para los impactos que allí se generarán, pues estos serán unos momentos de crecimiento económicos o bonanzas que serán muy positivos en la medida en que nos eduquemos para ello o muy dañinos si no sabemos administrarlos; con flujos de personas y una población mutante nunca antes vista y una proclividad hacia los ilícitos que podrían llevar al traste con la educación y construcción familiar y social. Elementos de consumo incontrolados y una generación de residuos por el crecimiento poblacional, dispararán las estadísticas de la problemática en salud, con evidentes impactos negativos que tendremos que prevenir desde ahora. Urabá Cultura Puerto, comienza una serie de foros y el inicio será a partir del 1º de junio en la sede del Sena en Apartadó, con la presentación de ponencias múltiples, incluida una por parte de la Gerencia Territorial del Contrato Plan Atrato Gran Darién quien además hará de moderador del mismo, con lo cual pretenden crear conciencia de la importancia y trascendencia de estas obras para Urabá, Antioquia, Colombia y el Mundo.
