El concejal de Medellín por el Partido Centro Democrático, Simón Molina, agradece al alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, y al gerente de EPM, Jorge Londoño de la Cuesta, la sinceridad y la transparencia con las que han manejado la contingencia de la Hidroeléctrica Pescadero Ituango, para que los habitantes de los municipios de Valdivia, Tarazá, Cáceres y Caucasia estén conscientes de la alerta y preparados para responder a eventuales emergencias en las que estén expuestas sus vidas.

Como lo ha manifestado el grueso de la Corporación de los medellinenses, Molina habla de solidaridad con las comunidades amenazadas y con EPM, empresa que tantas cosas buenas le ha traído al crecimiento económico y al desarrollo humano y social de Colombia. Además, dice que no puede el Nación olvidar que Hidroituango es un proyecto que aportará el 17 % de la energía del País.

Molina habla también de la EPS Mixta Savia Salud -sobre la cual está convencido que hay que salvar y capitalizar, sin necesidad de enajenar las acciones públicas- y de la seguridad de Medellín -que pese a la percepción de desesperanza reinante, está convencido de sus avances, pues hoy no está siquiera entre las 50 ciudades más violentas del mundo, cuando a comienzos de los años 90 Medellín fue la ciudad más violenta del orbe.