Un grupo de docentes y estudiantes de la Institución Universitaria Pascual Bravo de Medellín construyó el primer avión eléctrico del País, con la intención de impulsar la industria aeronáutica y combatir las problemáticas ambientales que genera la aviación, como la emisión de calor y de partículas de CO2 y gases, además de la contaminación auditiva.
Después de 10 años de estudios de los diseños y dos más de construcción, este ultraliviano comenzará las pruebas de funcionamiento en los próximos días. El objetivo es hacer ensayos de carreteo, despegues y circuitos alrededor de pista, al tiempo que se observará el comportamiento de la aeronave bajo las condiciones climáticas, geográficas y topográficas de Colombia.
“El avión tiene una autonomía de una hora de vuelo y será capaz de alcanzar una velocidad de 18 metros por segundo. Está impulsado por dos motores de 10 kilovatios y dos baterías de litio que se prenden vía bluetooth por medio del celular”, comentó el líder del Grupo de Investigación e Innovación Ambiental (GIIAM), el docente José Alejandro Posada.
La estructura es de aluminio forrado en tela aeronáutica; mide 11 metros de ancho y 5.5 metros de largo, aproximadamente; tiene un tren de aterrizaje tipo triciclo, es decir, dos pedales que permiten mover las ruedas de adelante hacia la derecha o hacia la izquierda; un timón de dirección que va en la cola de la aeronave y el mando central para los alerones que permiten direccionar la misma.
“La Institución Universitaria Pascual Bravo demuestra una vez más que, a través de sus grupos y semilleros de investigación, le apostamos a la sostenibilidad y sustentabilidad ambiental y, en proyectos como el avión eléctrico se evidencia la innovación, tecnología, ciencia y la generación de condiciones que permiten convertir a Medellín en Valle del Software”, afirmó el rector de la Institución Universitaria Pascual Bravo, Juan Pablo Arboleda.
La Institución Universitaria Pascual Bravo ha invertido cerca de 80 millones de pesos y, posterior a los resultados de las pruebas, en un futuro se comenzaría a trabajar en un avión con mayor autonomía de vuelo y para dos pasajeros.