“Los recientes acontecimientos nefastos ocasionados por la actual ola invernal en todo el país y, en especial, los que produjeron la muerte de más de 50 personas y la desaparición de más de 150 en el barrio La Gabriela de Bello, tienen que ponernos a reflexionar seriamente sobre nuestra conciencia ambiental”, piensa el “econcejal” de Medellín, Nicolás Albeiro Echeverri Alvarán.
El Coordinador de la Bancada Conservadora del Concejo de Medellín llama la atención sobre la urgencia de respetar la naturaleza, para evitar hechos tan dolorosos como el de La Gabriela, donde el mal uso de las aguas produjo filtraciones y la posterior tragedia.
Echeverri Alvarán dice que Medellín tiene una densa red hidrográfica conformada por 57 afluentes que caen directamente al Río Medellín, y más de 700 corrientes de segundo y tercer orden. Por eso le preocupa que desarrollos urbanísticos no controlados sigan invadiendo los cauces de las quebradas, las cuales más temprano que tarde buscarán hacerse nuevamente visibles, primero, produciendo humedades en las viviendas y, después, fallas estructurales que afecten a toda la comunidad.
Nicolás Albeiro Echeverri recuerda que otras causas del deterioro de cauces y riberas son los botaderos de basuras y de escombros, y el vertimiento de aguas residuales domesticas e industriales. “Estas aguas vertidas por Empresas Públicas de Medellín y algunos particulares, aportan un caudal adicional a las quebradas, lo cual produce un efecto altamente negativo en la contaminación de las aguas y en el acelerado proceso erosivo de los cauces por socavación del lecho de las corrientes de agua”, explica el “Econcejal”.
Dice que tampoco se están respetando las fajas de retiro que se deben conservar a lo larga de los cauces, generando problemas de obstrucción y deslizamientos. En este aspecto convoca nuevamente a la Gobernación de Antioquia, a la Alcaldía de Medellín, al Área Metropolitana del Valle de Aburrá y a CORANTIOQUIA, para que no dejen morir el Proyecto Parque Central de Antioquia.
Nicolás Echeverri recuerda la importancia de un parque natural de 900.000 hectáreas en la región central del departamento, con la finalidad de que se convierte en la principal estrategia de conservación, manejo de los recursos naturales y oferta ambiental para los ciudadanos de los 10 municipios del Valle de Aburrá.
Mientras tanto, Nicolás Albeiro Echeverri Alvarán pide más conciencia de toda la ciudadanía. Solicita que piense en que los recientes aguaceros que alcanzaron un nivel de pluviosidad de hasta 40 milímetros de agua en períodos inferiores a una hora, no son normales. Asegura que son efecto del maltrato que el hombre le ha venido haciendo a la tierra, y sumados a la deforestación, disposición de basuras y escombros en los cauces, invasión de las áreas de retiro, manejo del drenaje, inestabilidad de taludes, etc., son los causantes de tragedias como la de Bello.
El “econcejal” Nicolás Albeiro Echeverri se solidariza con las víctimas del alud de La Gabriela, y les recuerda a las autoridades que no basta con alertar a las comunidades que se encuentran en zonas de alto riesgo. Es necesario reubicarlas oportunamente, y con ayuda estatal.
Al Alcalde y al Concejo de Medellín y al Gobernador y a la Asamblea de
Antioquia, les recuerda que en la ciudad hay 35 mil familias que requieren ser reubicadas para salvarles las vidas.