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El ex secretario de Gobierno de Medellín, Gustavo Adolfo Villegas, aclaró las supuestas relaciones que tuvo con Daniel Alberto Mejía, alias ‘Danielito’, y con la denominada “oficina de Envigado”, cuando fue el titular de la Secretaría de Gobierno según las declaraciones presentadas por Juan Carlos Sierra, alias “El tuso”, aparecidas en la Revista Semana el 13 de marzo. De acuerdo con Villegas, estas afirmaciones están soportadas en dos afirmaciones de débil argumento y de manifiesta mala intención.
Con el propósito de poner en conocimiento de la opinión pública lo que denomina falta de veracidad y objetividad, Gustavo Adolfo Villegas hace las siguientes aclaraciones:
- Es indiscutible que en desarrollo de las funciones como Director del programa Paz y Reconciliación (Enero 2004 – Agosto 2006) y Secretario de Gobierno de la ciudad (Agosto 2006- Diciembre 2007) era mi deber realizar la debida interlocución con las personas que desde el Gobierno Nacional fueron informadas como ex integrantes de los grupos de Autodefensas desmovilizadas en el marco del proceso de paz. En este sentido, es mal intencionado afirmar un vínculo con la ilegalidad por el hecho de tener una comunicación con los desmovilizados.
- Con respecto a la primera mención: Como Secretario de Gobierno nunca pude llegar a beneficiarme del otorgamiento de licencias para el funcionamiento de casinos, maquinas tragamonedas o cualquier otro juego de suerte y azar, toda vez que es el Gobierno Nacional en cabeza de la Empresa Territorial para la Salud – ETESA y no la Secretaría de Gobierno Municipal la que expide la respectiva licencia o resolución de autorización para explotación de juegos en esta modalidad, tal como lo estipula la Ley 643 de 2001.
- Con respecto a la segunda mención: Como Secretario de Gobierno nunca pude haber facilitado el ingreso en carros oficiales a Alias “Cesarín” (o a cualquier otra persona) al Centro de Reclusión de La Ceja, ya que el ingreso a dicho sitio solo era posible, previa autorización de la Oficina del Alto Comisionado para la Paz y cumpliendo con el debido procedimiento de registro de cédula y huella. Es preciso aclarar también, que la Alcaldía de Medellín no emplea chalecos azules con el nombre de “Gobernación de Antioquia”, como los que dice recordar el declarante que se empleaban para el ingreso al centro.
Pese a que he sido partidario de guardar silencio ante necias acusaciones que carecen de fundamento, creo conveniente para el caso expresarme frente a las falsas afirmaciones cuyo efecto puede representar algún beneficio de la reducción de la pena del extraditado y el deterioro de mi integridad y mi imagen pública.
