Los índices de pobreza y de indigencia en Colombia son vergonzosos, aseguró el presidente Juan Manuel Santos hace unos días cuando informó que el nivel de pobreza en el país supera el 45,5% y que la indigencia se ubica en un 16,4%.

“Partiendo de  esta cruda realidad, podríamos decir que también es vergonzoso y descarado que las entidades financieras en Colombia continúen con el desbordado aumento en las comisiones por los servicios que prestan”, asegura la concejal de Medellín, Aura Marleny Arcila Giraldo, quien advierte que Bancolombia es  la entidad que más cobra a sus clientes por retiros de dinero y consultas de saldo, al retener 7.500 pesos por retiro en cajero de otro banco; le siguen en su orden, HSBC Colombia, con 7.200 pesos; BBVA  Colombia, con 7.100 y Davivienda, con 7.000 pesos.

“En un país como Colombia donde 20 millones de habitantes son pobres, resulta inaudito que los ciudadanos paguemos por las consignaciones a nivel nacional, un promedio de 8.100 pesos, y por una chequera, hasta 390.000”, se lamenta la Concejal Liberal.

Desde  hace varios años sectores políticos y sociales han insistido en  que los servicios financieros en Colombia se han vuelto excesivamente costosos,  y que en muchos casos se abusa de los clientes, no obstante los buenos resultados en utilidades  que mes a mes registra el sector bancario.

Para la concejal Aura Marleny Arcila, quien es contadora pública y especialista en políticas y legislación tributaria, resulta injusto que los bancos además de cobrar altas  tasas de interés por su labor de intermediación, establezcan elevadas comisiones por los servicios que prestan, cuando el Gobierno  mantiene un antitécnico impuesto a las transacciones financieras del 4 por mil.

Arcila Giraldo explica que los altos costos en los servicios financieros se producen porque  no hay una legislación que limite el precio de esos servicios, y por la inexistencia de una sana competencia entre los bancos. Recuerda que en México, Ecuador, Chile y Brasil, recientemente se  presentaron  cambios en la legislación para controlar y poner límite  al cobro de algunos servicios financieros.  Mientras tanto en Colombia, donde los costos de las comisiones que deben pagar los usuarios está entre  los más altos  del mundo,  se continúa a la espera de la aplicación de la Reforma Tributaria aprobada en diciembre pasado, en la que quedó expreso  que el Gobierno deberá intervenir las tarifas de los servicios bancarios. Igualmente se está a la espera de la aprobación en el Congreso del Proyecto de Ley 097 de 2010, que busca regular las tarifas de los servicios bancarios.