Por: Francisco Galvis Ramos
La Casa de Borbón tiene origen en la localidad francesa de Bourbon-l’Archambault y llegó a la península por disposición testamentaria de Carlos II de España quien, al no tener hijos, pidió que un descendiente de esa línea fuera el sucesor en el trono español. Así advinieron los borbones a España en el siglo XVIII, con Felipe V, nieto segundo del rey de Francia Luis XIV y de la infanta española María Teresa, reina de los franceses.
El actual rey, Juan Carlos I, también es Borbón, pero no me voy a referir a él ni a sus difundidas travesuras, sino que quiero poner en contexto una frase inmortal originada alrededor de lo caraduras que fueron o son ciertos borbones, entre ellos el conde de Provenza autoproclamado rey de Francia en 1795. Este Luis XVIII de la manera más desafortunada formuló la Declaración de Verona, dándole un portazo a una monarquía constitucional moderada en Francia, de donde cavó la ruina de los borbones franceses para vivir errante por Europa. Efectivamente: un rey sin trono, ni gloria, sin nadie que lo pretendiera.
Desde entonces se dice de aquellos que no toman experiencia de malos pasos dados, propios o ajenos, y los repiten, que “son como los borbones, que ni olvidan ni aprender”. De veras una frase que otra vez hace perdurable el ex alcalde Alonso Salazar Jaramillo en las declaraciones que dio este 6 de mayo al diario El Colombiano.
No voy a entrar a malherir del doctor Salazar porque en general no es de mi usanza, salvo cuando en contadas ocasiones se me han ido los gavilanes de mi afilada pluma, pero si debo señalar que, no habiendo aprendido él de las consecuencias de reciente disciplinario, ahora se le fueron de nuevo las luces.
A la pregunta del reportero acerca de “¿Quiénes estarían detrás de la Procuradora Delegada y del Procurador?”, contestó: “Son los abogados que están actuando. Los que asistían a la audiencia, un abogado reinsertado del 12 de octubre, el señor Francisco Galvis que fue director Seccional de Fiscalías, al parecer con algún parentesco con el gobernador (sic) (Luis Alfredo Ramos). El abogado Jasin, el abogado Alarcón, hacen parte de ese staff jurídico muy asociado al movimiento del señor Luis Pérez…”.
De todo los mencionados por el señor ex alcalde solo conozco y he tratado y por distintas razones y en diversas épocas a los doctores Luis Alfredo Ramos Botero y Luis Pérez Gutiérrez y me complace reconocer que me une a ellos tersa amistad personal, sin ninguna especie de sumisión profesional o política. De otra parte, salvo del pecado original, no soy reinsertado de nada, ni de ninguna parte y ahí estarán los registros oficiales que lo digan.
Considero de la más alta gravedad lo que dijo el doctor Salazar y recogió el diario, por el daño moral que nos ha inferido a mi familia y a mí en términos de nuestro buen nombre, de nuestro honor y de nuestra seguridad personal y no puedo excusar que el periódico haya omitido repreguntar al deponente sobre las pruebas de sus dichos en relación conmigo.
Los borbones, por no tener presente lo que no se debe hacer, ni aprender de las lecciones que la vida da, perdieron en Francia chicha, calabaza y miel y ahora el señor ex alcalde deberá salir a respondernos por los perjuicios causados.
Tiro al aire: al buen callar llaman Sancho, sobre todo en ocasiones en que él ánimo no esté asistido de la necesaria cordura.