Por: Diego Calle Pérez.
Pocos alcaldes se hacen presentes en los grados de bachilleres. Son contados los alcaldes, que se preocupan por las instituciones educativas, por mejorar los baños y si la piscina del uso municipal, está en condiciones para entrenar mientras están en la asignatura de educación física, deporte y recreación dirigida. Son pocos los alcaldes, que, dentro de su plan de desarrollo municipal, hacen gestión por mejorar las condiciones laborales de los docentes.
Pocos alcaldes se preocupan por la alimentación de los niños en el jardín infantil, en la primaria y los escándalos cada día suman más investigaciones en la procuraduría y la fiscalía, con respecto al Plan de Alimentación en las diferentes instituciones educativas del sector oficial. Las alcaldías se preocupan por la pintura y el arreglo que contrata el ladrillo, varilla y cemento, que por el internet, la biblioteca y la ludoteca. Muchas veces suministros que son inventarios de índole departamental o nacional. Las transferencias a las cuentas bancarias, de las instituciones educativas, son muchas veces manejadas por los propios rectores, justificando las inversiones en recibos de ferreterías y depósitos de materiales, de amigos conocidos.
Pocos alcaldes se hacen presentes en las actividades de los jóvenes, a no ser, que tengan cuadernos para regalar. Pocos alcaldes hacen gestión para foros educativos y muestras de ferias de la ciencia y tecnología. En muchas instituciones educativas se están formando jóvenes con mucho talento en análisis matemático, químico y físico, en deportes de competencia y algunas orquestas sinfónicas y uno que otro interprete musical. Pocos alcaldes se preocupan por implementar la tecnología, en las instituciones educativas y hacen de los programas nacionales parte de su agenda del plan municipal.
Pocos alcaldes se hacen presentes en las actividades de fomento a la cultura, a la educación y recreación en las instituciones educativas, la pandemia también contribuyó a opacar, lo que más prometen en campaña y por lo que menos hacen en la práctica. Pocos alcaldes sacan pecho en los finales de año con los bachilleres que pasan a la universidad pública y son pocos los concejales que gestionan un acuerdo municipal, con el propósito, de pagar los semestres, de los mejores estudiantes con el presupuesto municipal. Alcaldías y Tecnología.
