El Príncipe de Asturias, Felipe de Borbón y su esposa, la Princesa Letizia Ortiz, estarán en Medellín este viernes, 29 de mayo, para inaugurar en el Teatro Metropolitano el V Congreso Internacional de Víctimas del Terrorismo. En el evento, organizado por la Fundación Víctimas Visibles y la Universidad Sergio Arboleda, estará también el Presidente de México, Felipe Calderón.
La presencia de los Príncipes de Asturias es de gran importancia, debido a que han participado en tres versiones anteriores del Congreso, mostrando un compromiso con las víctimas del terrorismo.
En el V Congreso Internacional de Víctimas del Terrorismo se espera congregar a cerca de mil víctimas del terrorismo y a 600 invitados de todo el mundo. Allí las víctimas contarán sus historias, que reflejan momentos de violencia en países como España, Irlanda del Norte, Estados Unidos, Ruanda, México, Chile, Argentina y Colombia.
Entre las víctimas que asistirán a este Congreso Internacional se encuentra el español Jesús Gerardo Ramírez Castanedo, víctima del 11-M, que el jueves 11 de marzo del 2004, cuando iba hacia su trabajo en un tren de cercanías, perdió sus dos piernas por la explosión de dos bombas en un hecho que conmocionó a Madrid y al mundo entero.
Ramírez Castanedo participará en la Mesa Redonda Internacional denominada ‘España, una sociedad y unas víctimas empoderas’, en donde se pretende conocer y aprender de la experiencia española no sólo en materia de legislación avanzada, sino también en el compromiso adquirido por toda la sociedad. En dicha mesa se encontrarán también víctimas de ETA y del atentado terrorista en ‘El Descanso’.
Madrid (en la primera y cuarta versión), Bogotá y Valencia han sido las ciudades que han albergado las cuatro versiones anteriores del Congreso, que ha contado con víctimas de países como Estados Unidos, Israel, Irlanda, Colombia, Argelia, España, Perú, Gran Bretaña, Argentina, Holanda, Rusia, Indonesia e Italia.
Especialistas, políticos, jueces y periodistas han intervenido en las distintas ediciones del Congreso sobre la necesidad de que las víctimas no caigan en el olvido y que por el contario sean sujetos de derecho y reconocimiento.
