A pesar de los golpes a la delincuencia, es recurrente la impunidad, lo que no permite hablar de soluciones efectivas.
Según el Brigadier General Dagoberto García, Comandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, en Medellín y el Área Metropolitana se ha presentado un incremento en los homicidios del 50 por ciento en relación con el año pasado. El 68 por ciento de los delitos se presentan por llamados ajustes de cuentas, el 18 por ciento por violencia impulsiva o riñas y el 14 por ciento son homicidios aún por definir.
El Presidente del Concejo, Bernardo Alejandro Guerra Hoyos, aseguró que éste es un debate que tiene que ser motivo de preocupación y trasnocho, no sólo del ejecutivo municipal y departamental sino también de todos los ciudadanos y, básicamente, porque es un problema fundamentado en el narcotráfico que tiene un alto poder corruptor.
Después de mirar todo este diagnóstico se podría decir que la lucha contra la delincuencia se está ganando, pero contra el narcotráfico no, razón por la cual hay que replantearse si vale la pena o no la legalización de la droga. Esa puede ser la solución para que no nos continuemos matando en las zonas rurales y en las ciudades, dijo Guerra Hoyos.
El Presidente de la Asamblea, Juan Esteban Villegas, recordó que la seguridad es una función primigenia del Estado, el cual debe garantizar el disfrute de los derechos fundamentales, de la armonía y del bien común. Dijo que mucho se ha logrado desde los años 90 cuando la tasa de homicidios en Medellín era de 381 por cada 100 mil habitantes, pero hoy el enfrentamiento entre bandas por el control del narcotráfico vuelven a preocupar a las autoridades.
El concejal Santiago Londoño Uribe reiteró que mientras se siga presentando el 97 por ciento de impunidad en los delitos, por culpa de un sistema judicial que no es efectivo en todo su proceso (persecución, captura, judicialización y condena), el departamento y el municipio no tendrán soluciones definitivas en materia de seguridad.
El concejal Fabio Humberto Rivera Rivera aseguró que la ciudad necesita que de la mano de la inversión social y los programas de la Secretaría de Gobierno debe haber un mayor número de policías, no sólo para combatir sino también para prevenir el delito.
