Agencia Virtual de Prensa –AVP-. El educador y diputado de Antioquia, Santiago Ospina, le agradece a la ministra de Educación Nacional, Gina Parody, que haya escogido a Antioquia para llevar a cabo el Plan Piloto de la Jornada Escolar Extendida. Piensa que deben ser pocos los que se opongan a este proyecto ya probado en otros países, con buenos resultados pedagógicos, académicos y, especialmente, sociales, cuando se trata de acompañar más desde el colegio a población vulnerable.
Sin embargo, son muchos los cuestionamientos que, según el Diputado del Partido de la U, debe responder el Ministerio de Educación:
¿Cómo está concebido el Plan Piloto? ¿Qué significa la extensión de la jornada en términos de calidad académica? ¿Se contratarán nuevos y mejores docentes? ¿Se capacitará mejor a los docentes? ¿Se les pagará mejor a los docentes? ¿Tendrán más recursos físicos, técnicos, tecnológicos y financieros las instituciones educativas? ¿Deberán ampliar sus locaciones y construir nueva infraestructura? ¿O habrá que adecuar bodegas y lugares no aptos para la actividad pedagógica?
¿Se convertirán los colegios en depósitos de niños, niñas y adolescentes? ¿En qué materias, específicamente, se les ampliará la propuesta curricular? La ministra Parody habló de Ciencia y Tecnología en el Plan Piloto de Antioquia, pero ¿es lo que realmente responde a la vocación de los estudiantes de cada una de las nueve subregiones del Departamento? ¿Se tendrá en cuenta la diferencia geográfica, socioeconómica, cultural y étnica para responder con temas que sean pertinentes? ¿Se alejará cada vez más la esperanza de educación personalizada? ¿Habrá refuerzo de los restaurantes escolares? ¿Habrá cuidado en no reforzar con dulces y mantener un efectivo control nutricional? ¿Llegarán los niños, niñas y adolescentes a compartir más con su familia, o llegarán proporcionalmente más cargados de tareas escolares?
Santiago Ospina aclara que no se opone, que le gusta que se amplíen el tiempo y las oportunidades de aprendizaje con actividades, ojalá consensuadas entre directivas, docentes, estudiantes y padres de familia. Aunque le preocupa que se puedan disparar los índices de estrés y que la convivencia al interior de la comunidad educativa se ponga en riesgo.
Entre muchas otras inquietudes, el Corporado antioqueño espera que no se vaya a desvirtuar la propuesta con un exagerado “activismo” institucional para cumplir con el tiempo, mediante actividades improvisadas, inconclusas y sin contenidos curriculares. Que tampoco se caiga en el “asistencialismo” de tener estudiantes más tiempo entre los muros de los establecimientos educativos para sacarlos de las calles y de la soledad de la internet.
“Le auguro éxito al Plan Piloto de la Jornada Escolar Extendida en Antioquia si los componentes pedagógicos son claros y estructurados. Pero, además, si hay planeación, locaciones adecuadas, recursos suficientes y mucho respeto por la importante labor que han de desempeñar los docentes”, concluye Santiago Ospina.