La decisión del exalcalde de Medellín y excandidato a la Presidencia de la República, Federico Gutiérrez, de aspirar a la Alcaldía de Medellín y no guardarse para las elecciones presidenciales de 2026 -pese a sus 5.058.010 votos nacionales, 1.385.565 votos en Antioquia y 603.092 votos en Medellín-, aparentemente contradice la decidida actitud opositora al Gobierno del presidente Gustavo Petro que venía enarbolando.
Sin embargo, la explicación que dio para abandonar su aspiración presidencial la justifica, aunque, paradójicamente, les de la razón a algunos de sus émulos, como Rodolfo Correa, que como líder de la oposición pueda “convertir a Medellín en una trinchera de guerra contra el Gobierno nacional y utilizarla como un trampolín político para su obvia candidatura presidencial dentro de tres años”.
Además de la de Medellín, Federico Gutiérrez buscará alcanzar las alcaldías, concejos, gobernaciones y asambleas departamentales de varios de los 1.103 municipios y 32 gobernaciones de Colombia, con su recién nacido Partido Político “Creemos”, con el cual ya presentó su lista de 21 aspirantes al Concejo Distrital de Medellín.
A la Gobernación de Antioquia no habrá candidato por “Creemos”. Sin embargo, les mandó razón a los cuatro aspirantes a la Gobernación por la Ex Gran Coalición por Antioquia -Mauricio Tobón, Juan Diego Gómez, Eugenio Prieto y Andrés Julián Rendón- para que se unan, decidan el mecanismo democrático para escoger a uno de ellos como candidato único y cuenten con su apoyo.
Mauricio Tobón, aspirante por el movimiento “El Parche”, aceptó la sugerencia y procedió a extender la invitación a Gómez, Prieto y Rendón para que se vuelvan a sentar para buscar acuerdos programáticos y decidir con tres encuestas quién de los cuatro sería la fórmula de Federico Gutiérrez.
Pese al reconocimiento que las diferentes encuestas que se han realizado le dan, a los más de cinco millones de votos nacionales y más de 600 mil votos que obtuvo en Medellín en las elecciones presidenciales de 2022 y al apoyo de los diferentes partidos, movimientos, aspirantes y sectores sociales y empresariales, Federico Gutiérrez sabe que no se puede confiar y que tiene que trabajar duro si quiere convertirse en el próximo Alcalde de Medellín.
Igualmente pide respeto por los diferentes candidatos que emularán con él. Pide que se haga una campaña sin agravios, sin ofensas y si atentar contra la honorabilidad y la dignidad de quienes estarán al otro lado de su aspiración.
Federico Gutiérrez insiste en que no puede esperar a 2026 con proyectos más grandes para recuperar el País. Está convencido de que el servicio a la Ciudad es el mejor paso para empezar el objetivo nacional en el que ha venido trabajando desde que participó en las elecciones presidenciales, que a la postre ganó Gustavo Petro con su bandera del cambio.