Gerardo Vega, director de la Agencia Nacional de Tierras, precisó en Sinergia Informativa que no son sólo tres millones de hectáreas las que el Gobierno del presidente Gustavo Petro dispondrá para los campesinos sin tierra de Colombia. Se refiere a que no son sólo las hectáreas que mediante acuerdo firmado por el Gobierno nacional y la Federación Nacional de Ganaderos -Fedegan- se van a negociar, en el marco de la política de “reforma agraria” de la Administración Petro.
Gerardo Vega dice que son, además, siete millones de hectáreas en proceso de formalización para aquellos campesinos que las poseen, pero no tienen título sobre ellas.
“Inicialmente se han formalizado 681 mil hectáreas, de las cuales ya se entregaron 297 mil a resguardos indígenas”, manifiesta.
Agrega que, igualmente, hay que sacar adelante el catastro multipropósito, el cual le permitirá al Estado saber a ciencia cierta quiénes son los dueños, poseedores y tenedores de tierras y la vocación de éstas.
Recuerda que el propósito final de este proceso de reforma agraria es mejorar la calidad de vida de los campesinos de Colombia, camino a la “Paz Total” con justicia social y justicia ambiental.
Respecto de los tres millones de hectáreas del acuerdo suscrito el sábado, 8 de octubre de 2022, con Fedegán, el Director de la Agencia Nacional de Tierras le asegura al País que se garantizará que sea un negocio de tierras fértiles para cultivos de alimentos.
Por otro lado, Vega Medina manifiesta que los beneficiarios serán escogidos con mucha meticulosidad, para evitar la presencia de “avivatos” entre los nuevos propietarios de tierras rurales productivas. De hecho, en la Agencia Nacional de Tierras hay un cúmulo de solicitudes de gente que no tiene tierra y que lleva años buscándola para cultivarla.
“Con ellos se empezará la entrega, advirtiendo que seremos rigurosos para evitar que se beneficie gente que tenga otra propiedad o que acceda para hacer negocio con estas tierras”, precisa Gerardo Vega.
Expresa que son varias las dependencias que participarán en la escogencia tanto de las tierras como de sus nuevos dueños.
“La Unidad Agrícola Familiar define que dichas tierras tengan vías de acceso, servicios y que sean de calidad. La Agencia de Desarrollo Rural definirá los proyectos productivos. La Unidad de Planificación Rural Agropecuaria orientará las políticas de planificación de la propiedad rural para promover el uso eficiente del suelo. El Instituto Geográfico Agustín Codazzi definirá los avalúos para la compra de las tierras, que no tienen que ser sólo las de Fedegan sino las de cualquier particular que decida vender. Y la responsabilidad de la Agencia Nacional de Tierras es la de hacer la entrega de las tierras y formalizarlas y proceder con el catastro multipropósito”, explica Vega Medina.
Gerardo Vega recuerda que desde 1936 se vienen haciendo intentos tímidos para lograr una reforma agraria, pero sólo ahora se está concretando el anhelo que se suma a la reforma rural integral contenida en el acuerdo de paz con las FARC.
“Ahora hay que cumplir a rajatabla”, fue lo que dijo el presidente Gustavo Petro sobre este propósito que camina hacia la “Paz Total, que dignifique la vida de todos los colombianos, que facilite la convivencia en medio de las diferencias y que haga posible el desarrollo con equidad”.
