Por: Sinergia Informativa
A algunos miembros de Facebook les leí que les da miedo que Liliana Rendón llegue a la Gobernación de Antioquia. Recordando el precedente de la información, en la que se menciona a cinco de sus copartidarios con curul en el Congreso que no quieren que siga siendo ella la candidata única por Centro Democrático, y la supuesta presión ejercida sobre el expresidente Uribe por parte de algunos miembros del Grupo Económico Antioqueño para que le quite el respaldo a la Ex Senadora, también sentí miedo.
A mí me da más miedo, pero no por Liliana Rendón, a quien sólo le faltó ganarse una carrera de encostalados –como ella misma lo dijo en alguna entrevista en SINERGIA INFORMATIVA (Radio Única de Todelar – 1050 AM). A mí me da miedo que sea un puñado de antioqueños con inmenso poder económico el que decida quién debe ser el gobernador: Eso es plutocracia.
Me da más miedo la certeza de éxito electoral que parece desprenderse del apoyo de ese puñado de poderosos económicos: ¿Acaso no son mayoría los votos del resto de colombianos? ¿Acaso no es la democracia la que debe ganar?
Si puede más la plutocracia que la democracia, las decisiones de Antioquia seguirán «cooptadas» con prevalencia de intereses particulares económicos en perjuicio del bienestar general, que es como debería ser.
Hay que pedir carácter y dignidad, pero no sólo a Liliana Rendón. Hay que pedírselos a Federico Gutiérrez, traicionado por los fajardistas después de muchos meses y muchos kilómetros recorridos de la mano de Federico Restrepo, quien abandonó la emoción de “los Federicos” para hacer pareja con Alonso Salazar.
Carácter y dignidad para Luis Bernardo Vélez, quien de un día para otro resultó abandonado por la Alianza Social Independiente porque este Movimiento recordado por ser un “avalador”, decidió intempestivamente acompañar a Salazar.
Carácter y dignidad para Carlos Mario Montoya, abandonado por los conservadores de Itagüí dos días antes de la Convención Conservadora del 29 de mayo; y para Gloria Montoya, soslayada por los conservadores de Bello, quienes prefirieron continuar la saga política en la Alcaldía de este Municipio del Norte del Valle de Aburrá, con otro Suárez Mira…
Pero también, llamado al carácter y a la dignidad del presidente Santos y del expresidente Uribe quienes, según comentarios procedentes de los toldos de Luis Pérez y Liliana Rendón, han debido soportar las presiones de algunos representantes de grupos económicos que, supuestamente, no quieren ni al uno ni a la otra en la Gobernación.
La plutocracia sobre la democracia. Eso da más miedo. Sobre todo, porque en Medellín, Antioquia y Colombia ganan la indiferencia, la abstención y la compra –venta del voto. Porque si la lógica y el sentido común fueran las que decidieran, ciertamente sería la democracia la que elegiría, precisamente a quienes sean capaces de comprometerse con el interés general.