La situación de desplazamiento que se vive en Colombia y las cifras de desempleo que cada día suben más, han provocado que cerca del 10 %  de la población colombiana resida en el extranjero. “Pero lo más delicado de esta situación es que un alto porcentaje de estos colombianos vive en la sombra de la irregularidad sin una autoridad que les garantice sus derechos fundamentales y sometidos a un régimen de discriminación”, sostuvo Óscar de Jesús Marín, representante a la Cámara, por Antioquia, conclusión a la que llegó luego de realizar una investigación sobre el real estado de las condiciones de vida de los connacionales en el extranjero.

El Congresista antioqueño sostiene que el Estado debe garantizar los servicios de salud de igual calidad a todos los habitantes de Colombia y a los ciudadanos colombianos residentes en el exterior y a su núcleo familiar, independientemente de su capacidad de pago, dando cumplimiento al mandato constitucional de garantizar el principio de cobertura universal.

Preocupado por esta desigual situación y buscando que el Estado pueda brindarles a los colombianos los anteriores beneficios, Óscar de Jesús Marín, con el acompañamiento del ex gobernador de Antioquia,  Eugenio Prieto Soto, presentó el Proyecto de Ley 178 de 2009, por medio del cual se modifica la Ley 100 de 1993, y se regula el régimen de salud para los nacionales residentes en el exterior.  

Este Proyecto contempla que todos los habitantes de Colombia y los residentes en el exterior se beneficien de la cobertura en salud y se afilien al Sistema General de Seguridad Social, previo pago de la cotización obligatoria o en su defecto accedan a los subsidios del sistema.  

Las Empresas Promotoras de salud, EPS, serán las responsables de hacer los recaudos y de celebrar convenios con sus homólogas en el exterior para optimizar la prestación del servicio, además les corresponderá afiliar a los usuarios residentes en el extranjero. 

Para el representante por el Partido Liberal, Óscar Marín resulta paradójico que el Estado brinde garantías suficientes a los no nacionales radicados en Colombia y que deje a la deriva a aquellos compatriotas que han migrado, ya sea motivados por deseos de superación u obligados por la difícil situación económica y de orden público que vive el país.  

Marín insiste en que con este Proyecto de Ley se corregirá una falencia en la prestación de un servicio  público fundamental y se logrará la igualdad para los nacionales al garantizar el acceso a la atención en salud, sin importar donde se encuentren.