Agencia Virtual de Prensa –AVP-. El “econgresista” Nicolás Albeiro Echeverry Alvarán, radicó en la Secretaría de la Cámara de Representantes el Proyecto de Ley 208 de 2016, por medio del cual se crean las Mesas Ambientales en el territorio nacional como espacios de participación Intersectorial, interinstitucional e interdisciplinario.
Se trata de canales de mediación, interacción, intermediación y seguimiento entre las comunidades y el Estado, con el objetivo de aportar a la construcción y transformación participativa en los temas de sostenibilidad ambiental de cada uno de los municipios.
Estas Mesas Ambientales habrán de incidir en el direccionamiento de políticas públicas y participación en procesos de planeación local como los Planes de Desarrollo y los Planes de Ordenamiento Territorial; en el desarrollo de soluciones y alternativas para el mejoramiento ambiental y la calidad de vida desde los municipios, en articulación con las autoridades ambientales; en la creación de cultura ambiental con base en la educación ambiental; y en el fortalecimiento y veeduría de las potencialidades ambientales presentes en cada territorio.
Las Mesas Ambientales estarán conformadas por las Juntas Administradoras Locales, las Juntas de Acción Comunal, representantes de las ONG del sector social y ambiental, sendos representantes de la entidad ambiental y del sector educativo de cada uno de los municipios y representantes del sector empresarial.
“Cada una de las Mesas Ambientales deberá elaborar un plan ambiental que servirá de guía en su quehacer. En él se consignarán los proyectos y las actividades que respondan a los diagnósticos de cada uno de los municipios”, explica el “econgresista” Echeverry Alvarán.
El Proyecto de Ley contempla, también, la creación de redes departamentales, que estarán representadas en una Red de Mesas Ambientales a nivel nacional, la cual estará coordinada por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, con participación del Ministerio de Educación Nacional.
Las secretarías de Medio Ambiente departamentales y municipales serán las responsables de la coordinación interinstitucional, y les brindarán a las Mesas Ambientales todo el apoyo requerido para su conformación y buen funcionamiento, para lo cual gestionarán recursos financieros, técnicos, jurídicos y logísticos.
“El mejor modo de tratar los temas ambientales es con la participación de todos los ciudadanos. Es así como los colombianos se convierten en los orientadores de su propio destino, que no debe ser otro que una vida con calidad”, precisa Nicolás Albeiro Echeverry, quien recuerda que la paz, el desarrollo y la protección del medio ambiente, son interdependientes e inseparables.
Las Mesas Ambientales desarrollan el mandato superior frente a los derechos colectivos y del ambiente, según el cual “todas las personas tienen derecho a gozar de un ambiente sano (…) y es deber del Estado proteger la diversidad e integridad del ambiente, conservar las áreas de especial importancia ecológica y fomentar la educación para el logro de estos fines (artículo 79 de la Constitución Política). Además es su obligación proteger mediante la ley los derechos e intereses colectivos relacionados con el ambiente (artículo 88 de la C.P.) y, por su parte, los colombianos tienen la responsabilidad de proteger los recursos naturales y velar por la conservación de un ambiente sano (artículo 88 de la C.P.).