Diego Calle

Por: Diego Calle Pérez

La emisora más querida por los antioqueños CARACOL RADIO pierde sintonía en la capital de la montaña. La radio que por muchos años, desde su fundación en Medellín 1948, y hasta llegar a Miami y Nueva York, está perdiendo pauta publicitaria y sintonía entre sus muchos oyentes. La emisora que impulso voces tan recordadas como la de Manolo Bellon. Las tardes con Baltazar Botero. El humor de Montecristo y Los Tolimenses. La transmisión de las corridas de Toros.

Un jingle navideño grabado entre 1954 y 1955 que nos anunciaba la hechura del pesebre y del árbol hecho de chamizo con algodón, con las voces del trio Primavera, -que incluso eran de Medellín-, las hermanas Araque, Miriam y Blanca, con Angela Bustamante dirigidas por Manuel J. Bernal. Todavía la reliquia de jingle vende y afama a Caracol Radio por su archivo histórico y memorable. Sus oyentes no son los mismos fieles y pierde con los días más sintonía.

La emisora que fue primero propiedad de Coltejer, paso a manos de empresarios conocedores de televisión como Fernando Londoño y fue hasta de Alfonso López Michelsen, después al Grupo Empresarial Bavaria y en 1999 paso a manos de los Españoles del Grupo Prisa.

Los nacidos escuchando caracol radio, -encendido desde muy temprano en la cocina familiar-, fuimos testigos de las voces inolvidables como la de Juan Harvey Caicedo, Gustavo Niño Mendoza, y de la buenona de María Clara Gracia. Las semanas santas con el sermón de las siete palabras por Monseñor Augusto Trujillo Arango. Noches buenos días con Néstor Armando Álzate y su compañero contertulio como ninguno más Juan Manuel Serna. El tío Pascual que por más de 60 años nunca ha movido su dial, desde el radio de tubos y ahora digital, nos cuenta sus anécdotas de ser caracolero desde las montañas de nuestra Santa Rosa de Osos.

Los competidores de Caracol Radio son Blu radio, RCN radio, Todelar con Artunduaga y por algunos días el abogado greco-romano nacido en Manizales Fernando Londoño, desde la emisora de la familia Pava Camelo. Yamid Amat entre 1997 y 2004 con Radio Net, imito lo que por muchos años innovo en Caracol pero el entusiasmo le duro poco y se dedicó a sus emisiones en el uno, dos, tres al lado de sus divas. Con los años la programación ha variado y fue manejada por voces con estética y ética profesional. La luciérnaga se hizo sentir desde erase una vez el racionamiento de energía, con el ingeniero químico Hernán Peláez, que no va más. Hora 20 se convirtió en unos años en la repetidera de lo que ya sabemos con sus invitados mamertos.

Darío Arizmendi, el vecino de Yarumal, llego a caracol radio después de haber pasado por ser el cofundador del periódico el Mundo en la época perdida de los años ochenta. Nos atiborro de cuadernillos con aire de Cuba y de la Francia Socialista. Nos alerto acerca del SIDA y entre sus destacados columnistas el gran maestro Aguirre, amigo del hijo del salubrista, nos inculco la sátira fina y la crítica democrática.

Darío que empezó gagueando en las mañanas después de salir Yamid Amat, ahora se jacta de su sintonía inflada a punta de encuestas pagadas, pero no reales para sus patrocinadores de espacios publicitarios. Darío que llego con la aguapanela a sus espaldas, tomo capuchino bogotano y se volvió arrogante, no lee, no consulta y juega golf después de ganar premios internacionales por su programa cara a cara. Darío Arizmendi desafiante desde su micrófono, pero cobarde en los tribunales, donde se le puede demandar por calumnia e injuria radial. Arizmendi se atreve a comentar como empleado de Colanta las amenzas contra Hollman Morris y casi se le sale el corazón del susto el día 12 de agosto de 2010 cuando estallo un carro bomba en el edificio donde emite su programa seis a.m.  Casi pide refugio en España para vivir como vasallo de Prisa.

Darío Arizmendi, el hermano de Octavio y de Ignacio, es el menor de varios hijos del hogar Arizmendi Posada oriundos de Yarumal, la misma tierra de ilustres como Epifanio Mejía y Francisco Antonio Cano el gran pintor de Horizontes. Darío con su estilo hace quedar muy mal su apellido y la profesión de periodista radial asumiendo una posición muy cómoda y poco racional con los tantos temas que trata desde muy temprano.  Ojo con caracol radio, lo está quebrando él que fue fundador de la materia prima para madurar aguacates del valle de Toledo, muy cerca de la represa Hidroituango.