El defensor del Pueblo, Carlos Alfonso Negret Mosquera, dijo que el Premio Nobel de Paz al presidente de la República, Juan Manuel Santos Calderón, es un reconocimiento al anhelo de reconciliación de los colombianos y al sacrificio de las víctimas que ha dejado un conflicto armado de más de medio siglo en el País.

El Defensor del Pueblo destacó la perseverancia del Jefe del Estado y su equipo negociador en la búsqueda de una salida dialogada a la confrontación desde la mesa de La Habana, que durante los últimos cuatro años sesionó hasta alcanzar un acuerdo que el pasado 2 de octubre fue sometido a la aprobación del constituyente primario, el cual decidió democráticamente que no lo refrendaba con una votación de 6.431.376 votos por el «No» frente a 6.377.482 por el «Sí».

Negret Mosquera destacó el pronunciamiento hecho por el Comité Noruego del Nobel en el sentido de que los resultados del Plebiscito no equivalen a decirle no a la paz, y enfatizó que esta histórica distinción debe convertirse, por el contrario, en el punto de partida para edificar un nuevo país libre de todo tipo de violencia con el compromiso y la unidad del conjunto de la sociedad, los sectores políticos, los grupos guerrilleros, las Organizaciones No Gubernamentales y las demás fuerzas vivas del País.

El Defensor del Pueblo aseguró que resulta muy significativa la entrega del galardón el próximo 10 de diciembre cuando se conmemora el Día Internacional de los Derechos Humanos, y agregó que la mejor respuesta al Premio Nobel y el mejor homenaje a las víctimas del conflicto sería alcanzar antes de esa fecha un acuerdo nacional definitivo para superar las diferencias e instalar una cultura permanente de respeto por los derechos fundamentales de todos los colombianos.

El presidente Juan Manuel Santos manifestó que éste es un premio para todos los colombianos.